Los dos jugadores de la selección francesa de rugby Oscar Jégou (20) y Hugo Auradou (21) llegaron a Mendoza la noche de este jueves para ser imputados por el abuso sexual que denunció una mujer el último fin de semana en un hotel cinco estrellas de Ciudad, luego de vencer a Los Pumas en un amistoso en el estadio Malvinas Argentinas.
A las 23.30, los deportistas de elite arribaron a bordo de movilidades de la Policía de Mendoza luego de que una comisión viajó hacia la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y los transportó por tierra en un viaje que duró alrededor de 12 horas.
Los rugbiers sospechados por las vejaciones fueron bajados de los vehículos policiales en los que se trasladaban e inmediatamente los ingresaron a la Estación Transitoria de Detenidos y Aprehendidos (Estrada), localizada en calle Plantamura entre el Polo Judicial Penal y la cárcel de San Felipe.
Allí pasarán la noche a la espera de ser formalmente imputados este viernes a las 9 por la fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual Cecilia Bignert, quien se encuentra subrogando a su par Darío Nora durante la feria judicial de julio.
En principio, los integrantes del equipo nacional conocido como Les Bleus serán acusados foralmente por el delito de abuso sexual agravado por acceso carnal y por la participación de dos o más personas, que prevé penas que van de los 8 a 20 años de encierro.
No obstante, no se descartaba que pueda existir una modificación de último momento en el avoque de imputación que había formulado Nora durante las primeras horas de la instrucción.
Horas antes, el defensor de los deportistas, Rafael Cúneo Libarona, sostuvo en una conferencia de prensa que todo se trató de una relación sexual consentida y que «no hubo golpes ni agresión». Y agregó: «Son chicos que nunca imaginaron esta situación, son inocentes, desconocen absolutamente los golpes. Están conmovidos».
En ese sentido, explicó que pidió la posibilidad de que sus representados accedan al beneficio de la detención domiciliaria, ya que sus familiares viajarán a la provincia y buscarán alquilar un inmueble para alojarlos.
«Cuando tenés tutor, tobillera con control policial permanente, no tenés pasaporte, no hablás castellano y toda la delegación se volvió a Francia. Estamos garantizando que no hay riesgo de fuga ni entorpecimiento de la investigación», sentenció.
El caso
Los jugadores de la selección de rugby de Francia fueron detenidos la mañana del lunes en Capital Federal, luego de ser denunciados por abusar sexualmente de la mujer en un hotel cinco estrellas del centro de Mendoza.
Todo comenzó durante la madrugada del domingo, tras un primer encuentro en un boliche de Carrodilla, Luján, a donde se dirigieron varios de los integrantes de la delegación extranjera después de que Les Bleus enfrentaran y derrotaran a Los Pumas por 28 a 13 en el Malvinas Argentinas.
La denunciante, de 39 años, contó que llegó hasta el lugar con un grupo de amigas y tuvo un primer contacto con uno de los dos sospechosos, Oscar Jégou.
Agregó que ambos se dirigieron hasta un hotel de calle Belgrano de Ciudad en un Cabify y que fue sometida sexualmente por el citado deportista y luego por su compañero de cuarto, Hugo Auradou.
Cámaras de seguridad del hotel caparon el ingreso de todos los protagonistas al hotel y también durante su permanencia, por los pasillos y un ascensor. Pasadas las 8 del domingo, la mujer se retiró caminando sola de edificio.
Ese mismo día, por la tarde, radicó la denuncia y la derivaron al Cuerpo Médico Forense. Cuando obtuvieron los informes primarios que confirmaron la presencia de lesiones, los investigadores judiciales, principalmente Darío Nora y la jefa de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Daniela Chaler, solicitaron la detención de los dos rugbiers mientras se encontraban en CABA.
Tenían la información de que el equipo iba a salir del país vía aérea hacia Uruguay, a donde iban a disputar un encuentro con la selección de ese país por el International Rugby Union, por lo que aceleraron los trámites y pedidos de colaboración con las autoridades judiciales y policiales de Capital Federal, quienes finalmente procedieron a la detención de los sospechosos.
Fuentes judiciales detallaron que la denunciante hizo un relato contundente y «sin fisuras» de cómo se produjeron los hechos luego del encuentro en el boliche y lo que sucedió posteriormente en el hotel.
Fuente: El Sol