El cuerpo de una joven de 22 años fue encontrado sin vida en el congelador de su propia casa, y su familia señala al exmarido como el principal sospechoso del crimen. La víctima, madre de dos niños de 2 y 5 años, había intentado poner fin a la relación con el padre de sus hijos pocos días antes del trágico suceso. Según declaraciones de su mejor amiga, el hombre la había amenazado diciéndole que, si lo dejaba, la mataría.
El macabro hallazgo ocurrió este lunes en la Zona Oeste de Río de Janeiro, Brasil. El cuerpo de la chica fue hallado por su padrastro ese mismo día. Según indicaron las primeras pericias, la causa de muerte fue un brutal ataque con un arma blanca. Se cree que los hijos de la pareja presenciaron el crimen.
Milena Vitória García de Barros había intentado ponerle fin a una relación en la cual sufría violencia de género. Una amiga de la joven dijo a los medios locales que luchó por separarse de su marido, Marcos Vinicius, por los reiterados ataques que recibía de su parte, pero el hombre no aceptaba esa decisión.
“Al poco tiempo de lograr separarse, comentó que él la atacó y la amenazó con matarla. Dijo que él la amenazó diciéndole que si se separaba la mataría”, fue el testimonio de la amiga de la víctima, publicado por el medio brasileño g1.
La mujer estaba decidida a ponerle fin al infierno que estaba viviendo por la violencia que recibía de parte del padre de sus hijos. Dos semanas antes de ser asesinada, había compartido publicaciones en las cuentas de Facebook sobre violencia de género.
En uno de los posteos, compartió varias imágenes de remeras ensangrentadas con palabras que suelen utilizar los agresores después de los ataques. Algunas de las inscripciones eran: “Fue sólo una vez”, “Lo irrité”, “Parará” y “Fue la última vez”. Otra publicación incluía el siguiente texto: “enséñale a tu hijo a nunca atacar a una mujer y a tu hija a nunca perdonar un ataque. El futuro te lo agradecerá”.
Su cuerpo fue encontrado en un congelador
El padrastro de Milena, preocupado por no poder comunicarse con ella, fue a su casa y se encontró con una escena aterradora: el cuerpo sin vida de la joven yacía dentro de un congelador, con signos evidentes de violencia. De inmediato alertó a las autoridades, y la Policía Militar arribó al lugar pocos minutos después.
El hombre relató a los agentes que, el viernes 1 de noviembre, el exmarido de la joven había recogido al hijo mayor de ambos para pasar el fin de semana juntos. Sin embargo, más tarde le envió un mensaje a Milena advirtiéndole que nunca volvería a ver al niño. En la madrugada del lunes, el exmarido regresó a la casa de Milena con el nene y le pidió conversar.
Los vecinos del barrio estaban alertas a lo que ocurría en esa casa porque estaban al tanto de los episodios de violencia que sufría la mujer. Esa noche, varios testigos vieron al hombre entrar con el nene y, después de un rato, salir con los dos menores. Al sospechar lo peor, llamaron al padrastro de la joven.
Horas después del crimen, el sospechoso dejó a sus hijos al cuidado de un familiar y se entregó a la policía. En un comunicado, la Policía Civil informó que estaba trabajando para esclarecer las circunstancias en las que ocurrió el asesinato.
Fuente: TN
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