Alejandra Gómez, pareja del gendarme argentino secuestrado en Venezuela, aseguró que no tiene contacto con él desde el 8 de diciembre. “Nahuel venía como un ciudadano más. Él venía como el papá de mi hijo. Tenía todos los papeles en regla. No hay razón para que Nahuel esté pasando esto, más allá de que él pertenezca a la Gendarmería argentina”, remarcó la mujer de nacionalidad venezolana y residente argentina desde hace 6 años. Ambos se conocieron en Buenos Aires, tienen un hijo de 2 años y viven en Mendoza desde hace un año y medio.
Según su relato, Nahuel Agustín Gallo había viajado a Venezuela para disfrutar de unas vacaciones familiares, aprovechando su licencia de trabajo. Sin embargo, el viaje dio un giro inesperado cuando Gallo fue detenido bajo acusaciones absurdas. “Para nosotros esto fue muy difícil, porque no era el plan de lo que teníamos para sus vacaciones. A mí lo que se me cruza por la cabeza es pensar lo que él debe estar pensando, que haya tenido un giro tan horrible. Estamos viviendo una pesadilla”, dijo Gómez.
El gendarme fue secuestrado por las fuerzas de seguridad chavistas cuando ingresó al país caribeño desde Colombia por el puente internacional de Táchira, el domingo pasado. Su objetivo era visitar a su pareja, que había viajado porque tenía que hacer unos trámites, y a su hijo de dos años. La estadía de Gómez se postergó por distintos motivos y lleva más de 7 meses en Venezuela.
“Hizo frontera con Colombia. Sellaron su pasaporte. Salió de Colombia legalmente y entró a Venezuela legalmente. Tenía todos sus papeles. Incluso, yo pregunté si podían ingresar los extranjeros a Venezuela y me dijeron que sí. Había corroborado esa información”, precisó la mujer en declaraciones a Radio Mitre.
Mientras el gobierno de Nicolás Maduro lo acusa de ser un espía, la Cancillería argentina trabaja contra reloj para demostrar que fue “un viaje familiar” y exigir su liberación. “Sé que Nahuel está acusado de algo clásico, de lo que se acusa a la gente en lugares como Venezuela, como Rusia, como China, que es espionaje”, explicó.
“Nunca imaginé estar viviendo este panorama más allá de no ser ajena a la situación política de Venezuela. Pero quiero dejar en claro que nosotros somos apolíticos”, enfatizó Goméz. “Somos gente trabajadora. Todos los que conocemos a Nahuel sabemos la clase de persona que es. Sabemos que es un tipazo, un hombre de familia, un buen hijo, excelente papá y excelente marido. Lo único que queremos es que vuelva a estar con nosotros, que nos podamos reunir en familia y que esto quede solamente como un trago amargo”, pidió la mujer.
El cabo primero Gallo es oriundo de la provincia argentina de Catamarca, pero forma parte del escuadrón 27 de “Uspallata”, en Mendoza, y custodiaba el paso fronterizo entre Chile y Argentina. Estaba de licencia anual y había viajado de forma legítima a Venezuela, con autorización de la Gendarmería, para visitar a su pareja e hijo. No tenía vínculos con operaciones de inteligencia ni con actividades oficiales.
Al ser entrevistada en Radio Rivadavia, Gómez también desmintió especulaciones que circulan en redes sociales sobre el motivo del viaje de su esposo, así como críticas hacia su decisión de viajar a Venezuela. “He tratado de no ver tanto, de alejarme un poco de las redes sociales porque me afecta muchísimo. Se dicen muchas cosas que no son. Nahuel vino como un ciudadano común, como el papá de Víctor, como mi pareja. Más allá de ser gendarme y de que esto haya tomado un rumbo totalmente diferente al que nosotros queríamos, quiero que sepan que él es totalmente inocente y que lo que le está pasando es totalmente injusto”, afirmó.
En cuanto al objetivo del viaje, explicó que Nahuel aprovechó su licencia para visitar el país natal de Gómez, algo que habían planeado cuidadosamente. “Somos gente de a pie, somos gente trabajadora. Compramos los pasajes con muchísimo esfuerzo. Le decía: ‘Tienes que conocer Venezuela, las playas en Venezuela son hermosas, tienes que conocer mi país’. Lamento mucho que sea mi país el que le esté haciendo esto”, enfatizó Gómez, quien aclaró que cruzó a Venezuela desde Colombia porque el pasaje salía más barato.
Gómez destacó que la familia lleva un bajo perfil y que la exposición pública no es algo a lo que estén acostumbrados. “Somos personas que nos mantenemos muy bajo perfil, no nos publicamos en redes sociales. Dentro de la intimidad de nuestro hogar todo está bien. Tenemos un hijo bellísimo que está esperando a su papá desde el domingo”.
En cuanto al lugar de detención de su esposo, Gómez afirmó que no hay confirmación oficial, aunque manejan versiones extraoficiales que apuntan a un traslado a Caracas: “Lo que nosotros hemos podido corroborar, aunque no hemos podido confirmarlo, es que él pudo haber sido trasladado hacia la ciudad de Caracas. No sé si la ministra diplomáticamente pudo garantizar que está en Táchira, pero la información que yo tengo directamente es esa, que él puede estar recluido en Caracas”.
Consultada sobre la posibilidad de que Gallo esté detenido en El Helicoide, una de las cárceles más temidas de Venezuela, Gómez dijo: “Esperemos que no, esperemos que no, pero no se descarta la posibilidad”.
Gómez confirmó que mantuvo contacto con la Cancillería argentina, que está trabajando en coordinación con otros países para resolver la situación. “Sé que el gobierno ha recurrido a Brasil, a Francia y a Colombia para procurar alguna negociación, y que está trabajando para que esta pesadilla acabe pronto y podamos regresar a casa. La idea era que Nahuel viniese acá, pasáramos las fiestas decembrinas y regresar a casa el 30. Tenemos boleto de retorno a Argentina el 30″, remarcó.
La esposa del gendarme concluyó con un pedido de justicia y el deseo de que esta situación termine pronto para poder reunirse con su esposo: “Quiero que sepan que Nahuel es totalmente inocente y que esto es totalmente injusto. Solo espero que podamos volver pronto a casa”.
Fuente: Infobae