Las mascarillas volvieron a Nueva York. No se trata de una nueva ola de casos de covid, sino de una medida preventiva ante el humo proveniente de los incendios forestales de Canadá que envolvió este miércoles a Nueva York.
Las imágenes son impactantes. El esmog anaranjado oscureció los rascacielos. En tanto, las ciudades de la costa este de Estados Unidos emitieron alertas por la calidad del aire.
Decenas de millones de personas en toda la región estaban bajo advertencias de contaminación después de que el humo de los incendios forestales se desplazara hacia el sur, incluida la “Gran Manzana”, donde se recomendó a los residentes de la ciudad que limitaran las actividades al aire libre.
Una espesa niebla cubrió la Estatua de la Libertad
La espesa niebla envolvió la icónica Estatua de la Libertad y el horizonte de la isla de Manhattan, que normalmente brillaría bajo el cielo azul de principios del verano boreal.
La capital financiera de Estados Unidos y gran parte del estado de Nueva York quedaron bajo alerta sanitaria por la calidad del aire. También se emitieron advertencias en Washington, la capital estadounidense.
Mientras tanto, ee suspendieron todas las actividades al aire libre en las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York. El alcalde, Eric Adams, instó a los habitantes de la ciudad a limitar el tiempo al aire libre a “las necesidades absolutas”.
”Este no es el día para entrenar para una maratón”, dijo irónicamente a periodistas.
Las autoridades advirtieron que la calidad del aire era “poco saludable para las personas con enfermedades cardíacas o pulmonares, adultos mayores, niños y adolescentes” y cancelaron todas las actividades al aire libre en las escuelas públicas, incluidas las clases de deportes.
Canadá enfrenta una dramática e inusual ola de incendios que afecta vastas áreas del país, en especial en el territorio de Quebec.