ste martes, el gerente de Potasio Río Colorado (PRC), Emilio Guiñazú recibió en el sur a las autoridades de la empresa brasileña ARG y de la Compañía Minera Aguilar para recorrer las instalaciones de lo que fue la ex Vale. También estuvieron presentes funcionarios del Gobierno de Brasil.
Entre los acuerdos alcanzados entre la Provincia y las mineras se destaca la creación de una planta piloto para acelerar la entrada al mercado durante los primeros 18 meses. Guiñazú adelantó que la intención es que esta prueba empiece a producir en el lapso de un año.
“La mina piloto es una planta muy pequeña que está destinada a comprobar las diferentes etapas del proceso productivo y para tener una producción para entrar al mercado y así abrir el camino para el resto de la producción de la planta cuando esté todo terminado. Seguramente sea cerca de la mina para mover la salmuera pocos kilómetros. Lo ideal es que se empiece en menos de un año”, detalló el funcionario especialista en minería.
Según estimaciones del Ejecutivo provincial, Potasio Río Colorado puede llegar a producir 1,5 millones de toneladas anuales del mineral, con una capacidad de exportación de 600 millones de dólares por año.
Guiñazú destacó el trabajo que ha realizado el Gobierno, de las obras de mantención de infraestructura y de maquinarias que ha hecho desde que la minera Vale le transfirió los activos en 2017. Cabe recordar que la empresa canadiense paró sus actividades en 2013.
“Hicimos un inventario de todos los componentes principales, sobre todo de aquellos que tienen un largo tiempo de procedimiento y están en buen estado. El proceso puede comenzar de forma inmediata. Estamos dejando el proyecto en mejores condiciones que cuando lo encontramos. Eso nos llena de orgullo porque nos ha ayudado a conseguir inversores”, comentó Guiñazú.
El funcionario reconoció que el estado completo de la mina se encuentra en un 35% de lo que fue el proyecto minero de Vale, que se retiró hace exactamente diez años, pero que si se lo analiza en el actual acuerdo al que llegó la Provincia con la firma brasileña y su socia local, en esos términos, la planta entonces está en un 60%.
En la mina ubicada en el límite con Neuquén y a 180 kilómetros de la ciudad de Malargüe cuenta con 77 pozos de potasio inactivos. “Solamente en esos pozos hay más de 200 millones de dólares de infraestructura”, remarcaron desde PRC.
Hay actualmente unas 18 personas que viven en sus instalaciones, que tienen turnos de trabajo por 14 días, cumplido ese plazo, son reemplazados por otros operarios. Los directivos visitan la planta cada dos semanas, aproximadamente.
En pleno desierto, el yacimiento es una ciudad con algunas comodidades para que los trabajadores puedan tener una vida recreativa en esas dos semanas de labor: un microcine, dos canchas de fútbol -una de 5 y otra de 11-, una de básquet, dos de tenis, una sala sanitaria y un comedor muy amplio que, años atrás, nutría a unos 3 mil trabajadores. También hay un helipuerto y una pista de aterrizaje.
Si bien en la mañana del martes se firmó el acuerdo entre el Gobierno provincial, ARG y Compañía Minera Aguilar, la explotación completa de PRC tendrá que esperar como mínimo 2 años.
“Tenemos un año de planificación, de ingeniería y de calificación de proveedores de producción. De acuerdo al contrato que firmamos fue de 5 años. Eso incluye una serie de incertidumbre que tiene el inversor que esperamos que se vayan yendo con el transcurso del proyecto. Nosotros creemos que este proyecto ya puede estar en marcha en 2 o 3 años”, finalizó Guiñazú.