Tres conductores fueron detectados este fin de semana conduciendo bajo los efectos del alcohol en distintos puntos del Gran Mendoza. El dosaje realizado por efectivos policiales a uno de ellos dio un resultado tan alto que “rompió” el alcoholímetro; en otro caso, un automovilista que viajaba con su hija menor de edad chocó a dos patrulleros.
El primer hecho se registró este sábado, a las 22.30, en calles Los Paraísos y Los Aromos, de la capital provincial. De acuerdo con la información oficial, personal de la Unidad de Apoyo Policial (UAP) observó un vehículo Citroën que circulaba en dirección oeste-este y que chocó contra dos móviles policiales.
Al momento de la colisión, los efectivos se encontraban fuera de los vehículos, por lo que no hubo lesionados.
La prueba de alcoholemia arrojó un resultado positivo de 2,13 g/l. El conductor, de 46 años, viajaba con su hija de 7 años, quien fue trasladada a la Comisaría 5° y entregada a su madre.
Algunos minutos más tarde, a las 22.45 en la esquina de Teurlay y Adolfo Calle, de Guaymallén, un llamado al 911 alertó sobre un automovilista que manejaba en aparente estado de ebriedad en un Chevrolet Aveo, color azul, con una rueda pinchada.
El denunciante indicó que el conductor casi lo atropelló. Al llegar al lugar, personal de la Policía Vial detectó que el automovilista, de 40 años, emanaba un fuerte olor a alcohol. El dosaje confirmó las sospechas, arrojando un resultado positivo de 1,84 g/l.
Ya en la madrugada de este domingo se reportó otro caso de un conductor ebrio en Guaymallén. Ocurrió a las 4.40 en el Acceso Este, donde volcó una camioneta Ford Eco Sport que circulaba en dirección al oeste.
Médicos del Servicio de Emergencia Coordinado (SEC) asistieron al conductor, de 46 años, quien fue diagnosticado con politraumatismos y trasladado al Hospital Central.
Posteriormente, la Policía Vial realizó la prueba de alcoholemia, la cual dio error debido al elevado nivel de alcohol en sangre, estimado en más de 3 g/l.
Duras sanciones
Los tres conductores se enfrentarán a duras sanciones ya que desde agosto, en Mendoza se aplican castigos legales más severos para los conductores que presenten una alcoholemia superior a un gramo de alcohol en sangre.
La legislación impone que los conductores que presenten alcoholemia igual o superior a un gramo por litro de sangre enfrentan multas económicas que van desde $508.000 hasta $1.397.000 (equivalentes a 4.000 hasta 11.000 Unidades Fijas, con cada UF valorada en $127).
Las sanciones también incluyen arresto de hasta 120 días e inhabilitación obligatoria para conducir vehículos, que puede variar de 90 a 545 días.
La normativa establece que la inhabilitación para conducir debe cumplirse obligatoriamente y que el pago de la multa no exime ni reduce la duración de dicha pena.
Asimismo, los jueces tienen la facultad de imponer la obligación de asistir a cursos de capacitación, prevención y/o conducción responsable, en función de las circunstancias del caso.
Además, las licencias de conducir al igual que los vehículos de los infractores seguirán siendo retenidos y no se devolverán hasta que se haya cumplido con la sanción de multa o arresto correspondiente.
Por último, se determinó por ley que la negativa o la obstrucción a realizar el test de alcoholemia son consideradas como presunción legal de contravención.
Fuente: El Sol