Un equipo de la Universidad de Ginebra (UNIGE) ha descubierto un organismo unicelular capaz de formar estructuras muy similares a los embriones, por lo que la vieja pregunta de si fue antes el huevo o la gallina podría tal vez contestarse en favor del primero.
En términos evolutivos, la incógnita puede reformularse como si los procesos relacionados con los embriones —estructuras complejas que marcan el desarrollo inicial de organismos pluricelulares— precedieron o no a la aparición de los primeros animales multicelulares.
Este descubrimiento en sedimentos marinos en Hawái de la Chromosphaera perkinsii sugiere que los programas genéticos responsables del desarrollo embrionario podrían haber existido mucho antes de la evolución de los animales.
La investigación revela que este organismo es inusual. Aunque es unicelular, su ciclo de vida incluye una fase en la que forma colonias multicelulares. Estas colonias persisten durante aproximadamente un tercio de su vida y presentan diferenciación celular, es decir, las células adoptan funciones distintas dentro de la estructura. Estas colonias exhiben una estructura sorprendentemente parecida a los embriones animales.
“Es una especie unicelular, pero su comportamiento muestra que los procesos de coordinación y diferenciación multicelular ya están presentes en ella, mucho antes de que los animales aparecieran en la Tierra”, destacó en diálogo con EFE el profesor de Bioquímica Omaya Dudin, que lideró el estudio. “Las observaciones apuntan a que los programas genéticos responsables del desarrollo embrionario estaban presentes antes de la aparición de la vida animal”, concluye la investigación, publicada en la revista especializada Nature.
En términos prácticos, esto significaría que las capacidades que asociamos con los embriones multicelulares —como la diferenciación celular y la organización estructural— no son exclusivas de los animales. Más bien, representan un fenómeno que podría haber aparecido antes, favoreciendo la hipótesis de que “el huevo”, entendido como la capacidad embrionaria, antecedió al “animal”, la gallina.
La teoría evolutiva
Los investigadores de la Universidad de Ginebra (UNIGE) sugieren que las características observadas en este organismo unicelular, como la formación de colonias multicelulares con diferenciación celular, podrían ser vestigios de mecanismos genéticos anteriores a la pluricelularidad. El estudio se publicó en la revista Nature, que fue levantado por el medio científico Phys Org.
El hallazgo sugiere que los procesos biológicos complejos que asociamos con la multicelularidad podrían haberse originado en organismos unicelulares hace más de mil millones de años, mucho antes de la aparición de los primeros animales.
La investigación plantea que Chromosphaera perkinsii podría ser un vestigio vivo de los mecanismos genéticos que precedieron a la multicelularidad. Estas colonias multicelulares y su diferenciación celular serían evidencia de que los procesos que permiten la organización compleja en animales podrían haber evolucionado en un contexto unicelular, sirviendo de base para la pluricelularidad.
Interpretaciones alternativas del fenómeno
Sin embargo, el equipo de la UNIGE reconoce que podría haber otra explicación. Es posible que C. perkinsii haya desarrollado estas características de manera independiente, sin relación directa con la evolución de los primeros animales. Según esta hipótesis, el organismo habría seguido un camino evolutivo propio, desarrollando de manera única estructuras multicelulares similares a embriones. Este fenómeno, conocido como evolución convergente, plantea preguntas fascinantes sobre cómo la vida puede desarrollar soluciones biológicas similares en contextos completamente distintos.
Este descubrimiento también tiene implicaciones para la interpretación de fósiles de 600 millones de años que presentan estructuras embrionarias complejas. Durante décadas, estos fósiles han desafiado las teorías tradicionales de la evolución de la vida multicelular. El comportamiento de Chromosphaera perkinsii podría respaldar la idea de que algunos organismos unicelulares ya poseían la capacidad de formar estructuras organizadas mucho antes del surgimiento de los animales.
Fuente: Infobae