Los cepillos de dientes y cabezales de ducha están llenos de vida, según un nuevo estudio publicado en la revista Frontiers in Microbiomes. “La cantidad de virus que encontramos en ellos es absolutamente increíble”, aseguró Erica Hartmann, líder del estudio y profesora de la Universidad Northwestern, en Illinois, EE.UU. “Encontramos muchos virus de los que sabemos muy poco y muchos otros que nunca habíamos visto”, agregó.
Los microbiólogos descubrieron que también había una mínima coincidencia entre dos muestras: “Cada cabezal de ducha y cada cepillo de dientes es como su propia pequeña isla”, reveló.
La buena noticia es que los virus no son peligrosos para los humanos, sino que atacan y se multiplican dentro de las bacterias. Estos llamados bacteriófagos han sido objeto de creciente investigación para el tratamiento de infecciones bacterianas resistentes.
Los investigadores creen que los nuevos tipos de virus descubiertos podrían ser un tesoro en este campo. En las muestras se encontraron muchos fagos que infectan específicamente a micobacterias, causantes de enfermedades como la lepra, la tuberculosis y las infecciones pulmonares.
“Es asombrosa la cantidad de biodiversidad no explorada que hay a nuestro alrededor”, señala Hartmann. “Y ni siquiera hay que ir muy lejos para encontrarla: está justo bajo nuestras narices”.
Qué microbios viven en nuestros hogares
Para el estudio realizado en Estados Unidos, los investigadores pidieron a las personas que les enviaran cepillos de dientes usados y muestras de sus cabezales de ducha. Análisis previos ya habían mostrado una gran diversidad de bacterias en las muestras. Para el análisis de virus, se analizaron 34 cepillos de dientes y 92 cabezales de ducha.
“Este proyecto comenzó como una simple curiosidad”, explica Hartmann. “Queríamos saber qué microbios viven en nuestros hogares”.
”Superficies como mesas y paredes son difíciles de colonizar para los microbios porque prefieren ambientes con agua. ¿Y dónde hay agua? Dentro de nuestros cabezales de ducha y en nuestros cepillos de dientes”, enfatiza.
El equipo de investigación reveló que la diversidad de microbios en el baño no es razón para salir corriendo a comprar productos de limpieza con efecto antimicrobiano. Basta con cambiar tu cepillo de dientes regularmente.
Tampoco es necesario usar cepillos de dientes antimicrobianos especiales, ya que probablemente conducirían a la aparición de bacterias resistentes a los antibióticos, señala Hartmann. En cuanto al cabezal de ducha, limpiarlo con jabón y, si es necesario, usar un descalcificador.
“Los microbios están por todas partes, y la gran mayoría no nos enfermarán”, afirma. “Cuanto más los ataquemos con desinfectantes, más probable es que desarrollen resistencia o se vuelvan más difíciles de tratar”.
Fuente: TN