El presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció este miércoles la presencia «irregular» de unidades del Ejército, que se desplegaron en la plaza Murillo, en La Paz, en donde se encuentra las sedes del Ejecutivo y el Legislativo.
«Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. La democracia debe respetarse», ha manifestado el presidente Arce a través de su cuenta en la red social X.
Al frente de este intento de golpe de Estado, como ha denunciado el Gobierno, se encuentra el comandante del Ejército, Juan José Zúñiga, destituido en las últimas horas tras afirmar esta semana en la prensa que las Fuerzas Armadas actuarían para evitar que el expresidente Evo Morales pudiera presentarse a las elecciones.
Hasta el lugar se presentó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, quien está emitiendo a través de sus redes sociales el despliegue de los militares, que protegidos por escudos han tomado posiciones y cerrado los accesos a la plaza.
«Desmoviliza Zúñiga, va a ser peor. Estas a tiempo Zúñiga desmoviliza», le ha conminado Del Castillo.
Sin embargo, Zúñiga ha asegurado ante la prensa que «pronto» se formará un nuevo gabinete. «Se van a cambiar ministros, no puede seguir así nuestro Estado, haciendo lo que le da la gana. Estamos mostrando nuestra molestia», ha anunciado.
«Es deber, obligación, que sus Fuerzas Armadas otra vez recuperen esta patria, basta de empobrecer la patria y humillar al Ejército», ha dicho Zúñiga, quien ha asegurado que «por el momento» reconoce la autoridad del presidente Arce.
Zúñiga ha asegurado que cuenta con el apoyo de los altos mandos de las Fuerzas Armadas «No puede ser que la lealtad de los comandante se pague con deslealtad», ha dicho, aclarando que no es con el pueblo con quienes se enfrentan, informa el diario boliviano «Los Tiempos».
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, ha denunciado a través de un directo en Facebook que se está cometiendo un intento de golpe de Estado en Bolivia por parte de «una facción del Ejército», que ha evacuado la plaza Murillo y «no está permitiendo la entrada de otras personas».
«Han tomado las cuatro esquinas de ingreso a la plaza Murillo. Hay tropas también en las cuatro esquinas, hay tropas en el interior de la plaza Murillo y hay tropas frente al Palacio de Gobierno. Esto es lo que está sucediendo en este momento desde la Casa Grande del Pueblo», ha denunciado.
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, llamó a respetar la democracia tras los movimientos militares que este miércoles se han producido en las calles de La Paz, donde se encuentra la sede del Gobierno y que ha denunciado el presidente boliviano, Luis Arce.
«No se puede quebrantar el orden constitucional en Bolivia. La democracia debe respetarse», ha señalado el líder «popular» en un mensaje en la red social X.
La denuncia de Evo Morales
Anteriormente, el expresidente boliviano Evo Morales ha denunciado que se está gestando un golpe de Estado. «En este momento se despliega personal de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la plaza Murillo», ha escrito en sus redes sociales, apelando a los movimientos sociales a «defender la democracia».
«Convocamos a una movilización Nacional para defender la democracia frente al golpe de Estado que se gesta a la cabeza del general Zuñiga. Declaramos paro general indefinido y bloqueo de caminos. No permitiremos que las Fuerzas Armadas violenten la democracia y amedrenten al pueblo», ha escrito luego Morales.
Antes de que los militares tomaran la plaza, Morales ya había advertido a través de sus redes sociales de que algunos comandantes habían instruido a las tropas para volver de inmediato a los cuarteles a la espera de nuevas órdenes. «Esto levanta muchas sospechas del movimiento militar en Bolivia», alertó.
El repudio de la canciller argentina
La canciller Diana Mondino aseguró esta tarde que «la democracia no se negocia», al repudiar el intento de golpe de Estado a Luis Arce en Bolivia.
«Los gobiernos, sean buenos o malos, gusten o no, se cambian únicamente en las urnas. No se cambian con violentos golpes de Estado. La democracia no se negocia», expresó la canciller.
Fuente: Diario Popular