El ministro de Educación, Tadeo García Zalazar, presentó en Diputados una reforma para la gestión educativa en Mendoza. Se trata de un paquete de leyes que apunta a la mejora salarial de docentes a través de incentivos, el manejo eficiente de los recursos, el ordenamiento administrativo, y un modelo integrado que beneficie a los estudiantes.
Uno de los objetivos es premiar la mayor especialización sobre las incumbencias que acredite el docente. En este sentido, el ministro explicó que la formación y la capacitación no eran “reconocidos después salarialmente como en otras profesiones”, por eso, “la idea es que tengan ese reconocimiento y vamos a un sistema donde haya menor cantidad de rotación docente en las escuelas, más permanencia”. También plantea cambios en docentes que por razones de enfermedad ya no pueden estar frente al curso.
La reforma presentada, contemplada en tres proyectos, implica ordenamientos y estímulos:
Incentivo a la dedicación: los docentes podrán generar mayores ingresos a partir de la permanencia en una institución por más de dos años. De esta manera se promueve el arraigo pedagógico como también un proyecto institucional.
La estabilidad y la continuidad del personal docente y directivo en una determinada institución educativa resultan pilares fundamentales para el desarrollo de proyectos pedagógicos consistentes y efectivos.
Este arraigo no solo beneficia a los profesionales de la educación, sino que también contribuye directamente a la calidad de la enseñanza y al bienestar de los estudiantes, al facilitar la implementación de estrategias educativas continuas y coherentes.
Incentivo a la especialización: potenciar la formación continua, promoviendo la capacitación en las áreas de incumbencias donde se desarrolla cada docente.
Reconocimiento a especialidades prioritarias: a través de la asignación de becas a estudiantes y remuneración adicional a los docentes que se desempeñen en áreas consideradas prioritarias, conforme a las necesidades identificadas en el ámbito educativo anualmente.
Responder a la demanda de cobertura de servicios en áreas de vacancia: se amplían las posibilidades laborales para que docentes puedan cubrir la demanda y mejorar con ello la calidad educativa.
Mejorar la distribución de los recursos docentes: se flexibilizará el régimen de suma de cargos y horas cátedra hasta un límite de 48. Esto permitirá una mayor movilidad del personal, adaptando la oferta a las necesidades.
Incentivo para el cambio de funciones en apoyo a residencias de niñas, niños y adolescentes: los cambios de funciones por razones permiten a los profesionales desarrollar nuevas tareas dentro del ámbito del Ministerio de Educación. Con este cambio se prioriza el apoyo a Residencias Alternativas de las Infancias, a los CEPI (Centros de Primera Infancia) y demás instituciones definidas como prioritarias.
Evolución del GEM: sostenidos en la idea de modernización continua, se trabajará para mejorar las herramientas de innovación como el GEM, “que han tenido buenos resultados en los últimos años”. Por ello, se avanzará hacia un Sistema de Gestión Educativa Integral (GEI) incorporando a los ya existentes, módulos específicos para capacitación y recursos humanos. Esto permite mejorar las prestaciones y exportar la herramienta completa o de forma modular hacia otras jurisdicciones que lo están solicitando. Por otro lado, se establecerá un nuevo protocolo de carga de datos, con plazos específicos, para hacer más adecuado y eficiente el uso de la herramienta.
Promover el proyecto educativo de una escuela: se busca que redunde en la mejora de los estudiantes, donde los mismos disfruten del conocimiento, la continuidad en el desarrollo y la práctica cotidiana. Esto implica un proyecto sustentable con docentes que lo lleven a cabo en el tiempo.
Fuente: Diario Jornada