A partir de esta medianoche, los combustibles volvieron a sufrir un nuevo incremento entre el 23% y el 27%, luego de que en diciembre, post devaluación, se registraron dos subas.
De esta manera, en Shell el litro de nafta súper pasa a costar 770 pesos, el diesel común se consigue desde los 860 pesos, mientras que la premium se vende en 938 pesos, aproximadamente.
En Axion, hay valores similares: 765 pesos el litro de nafta súper, 860 el diésel y 930 la nafta premium.
De momento, YPF no realizó cambios en sus precios, aunque se espera que se pliegue a los aumentos en las próximas horas.
El nuevo ajuste en los precios de los surtidores fue confirmado por el titular de la Cámara de Empresas de Combustibles, Raúl Castellanos.
«Lo que afecta a las estaciones de servicio es la comparación de los precios y la inflación, no en los costos de elaboración que son materia de las refinadoras. Con este cálculo que dije, para las estaciones veníamos muy atrasados y se habían equiparado. En 2023, los aumentos fueron del 260% y la inflación de un 200%, así que hay 60% puntos porcentuales que cubrieron ese desfasaje», explicó el empresario.
Pero también detalló: «La pauta actual es la liberación del precio».
Esta suba se suma al 12% que hubo en noviembre y al del 37% que se implementó en diciembre. En total, en ambos meses, el costo de los combustibles se incrementó un 77%.
Fuente: El Sol